Cátedra que obtiene en 1771 para el Cabildo Catedral de Las Palmas; pero, por desavenencias con algunos canónigos, se traslada, sin licencia, a la cátedra de Madrid. En 1772 es beneficiado de la iglesia parroquial de Santa Catalina (Sevilla) y, en 1780, a través de Nicolás Viera y Clavijo, toma posesión de una canonjía en Canarias, pero permanece en la Corte como apoderado del Cabildo; hasta que en 1791, con el obispo Tavira, regresa a las Islas. Además de diversos catálogos numismáticos, redacta (en latín) sendos folletos referidos a la necesidad y utilidad de la legua hebrea (1773) y suyas son las Exercitationes Philologicae Linguae Sanctae ac hebraici textus (1776).