Revista nº 1041
ISSN 1885-6039

Eternamente, nuevo trabajo discográfico del cantante Iván Montesdeoca en colaboración con el pianista Rayko León.

Sábado, 17 de Abril de 2010
Alejandro C. Moreno y Marrero
Publicado en el número 309

Se trata, en mi opinión, de un trabajo discográfico verdaderamente sublime, donde sus autores se acercan con exquisita sutileza y maestría a diversos aires latinoamericanos, especialmente al bolero, así como a otras canciones, baladas, tangos, etc.

 

Cuando coinciden en un mismo espacio y tiempo dos figuras estelares con el talento que tienen el cantante Iván Montesdeoca y el pianista Rayko León, el éxito está asegurado. Y eso es, por supuesto, lo que ha ocurrido esta vez con motivo de la grabación del CD Eternamente que ambos artistas han sacado al mercado hace pocas fechas. Para quienes aún no han tenido el privilegio de escucharlo, les adelanto que se trata, en mi opinión, de un trabajo discográfico verdaderamente sublime, donde sus autores se acercan con exquisita sutileza y maestría a diversos aires latinoamericanos, especialmente al bolero (tanto en su versión más clásica, como en su versión feeling e, incluso, jazzeada), así como a otras canciones, baladas, tangos, etc. A excepción del último corte, los temas que integran dicho trabajo han sido firmados, bien conjuntamente o bien de forma individual, por Néstor José León y por el propio Rayko León, hijo y nieto respectivamente de aquel afamado compositor de la época de oro de la llamada Canción Canaria o música canaria de raíz folklórica como fue el Maestro Miguel León Martín.

 

En el CD, integrado por diez temas, encontramos títulos como “A mí, que me den el mar”, un bolero jazzeado de bella factura; “Eternamente”, una bossa-nova muy fresca que le da título al disco; “Ahora sí”, un bolero de corte feeling; “Tu norte y el mío”, un tango clásico ciertamente hermoso; “Me iré también”, otro interesante bolero jazzeado; “Infidelidad”, una preciosa canción jazz; “Almas azules”, una canción con influencias cuban-swing; “Calles vacías”, un bolero instrumental con ciertas reminiscencias feeling, “Milagro y locura”, una lucida balada jazzeada; y, finalmente, “Moonriver”, una canción muy emotiva. A mi juicio, ninguna de estas piezas musicales desmerece ni un ápice a las obras que antaño salieran de la inspiración personal de autores reconocidos como Ernesto Lecuona, Rafael Hernández El Jibarito, Agustín Lara, César Portillo de la Luz y otros tantos compositores del panorama musical (sobre todo, bolerístico) latinoamericano.

 

Con Rayko León (ivanmontesdeoca.blogspot.com/)

 

 

Para esta grabación se contó con un amplio elenco de músicos de lujo, tales como Reinaldo Rivero, Kelo Montesdeoca, Carlos Mompeó, Jaime del Pino, Esteban Rodríguez, José Carlos Cejudo, Oswaldo Hernández, Fernando García, Alfredo Sánchez, Wolle Aretz, Néstor José León, Raúl Bermúdez, Juan Manuel Alemán y Willy Muñoz. Los arreglos y la dirección musical estuvieron a cargo de Rayko León, mientras que la producción fue llevada a cabo por Néstor José León. Por otro lado, se encargaron de la mezcla y masterización final Juan Carlos Sierra y Paco Santana.

 

Sin duda, estamos ante un disco realmente delicioso, de una calidad musical enorme, en el que un Iván Montesdeoca afinadísimo da muestra de su gran capacidad interpretativa y de su inigualable voz, a la vez que un brillante Rayko León se reafirma como uno de los pianistas más importantes que tenemos actualmente en Canarias, capaz de ejecutar con absoluta solvencia cualquier tipo de partitura. En fin, no quisiera extenderme más de lo debido, de modo que llegados a este punto simplemente me queda, una vez más, felicitar a sus artífices, Iván Montesdeoca y Rayko León, por tan espléndido trabajo discográfico. Muchas felicitaciones y enhorabuena, amigos.

 


 

Comentarios