La convencida creencia en las posibilidades artísticas de los naturales de Gran Canaria, condujeron a que, desde el “taller de experimentación” en que se convirtió la Escuela Luján Pérez, se sembrara toda una nueva manifestación artística, que recogiendo lo esencial de la naturaleza de la cultura generada daría lugar al Indigenismo.
Este término define el conjunto de obras de, por citar unos pocos ejemplos, Felo Monzón, Jorge Oramas, Plácido Fleitas o Jesús Arencibia en su sentido puro y de Juan Ismael, Manolo Millares, Antonio Padrón o Lola Massieu en un lenguaje de universalidad. Estos últimos confirman la capacidad de adaptación del artista canario a las corrientes más vanguardistas, sin renunciar a las señas de identidad que configuran lo canario.
Foto: Platanal, de Felo Monzón