El público canario ha agotado las localidades de todas y cada una de las 29 funciones de la gira canaria programadas hasta la fecha de la divertida comedia ‘La gran depresión’, que protagonizan Nuria Roca y Antonia San Juan a las órdenes de Félix Sabroso. Ni pandemia, ni estado de alarma. Nada ha podido con este ‘bombazo teatral’ producido por Acelera que sigue arrasando desde febrero pasado, cuando aún restan más de una veintena de funciones previstas entre junio y julio, antes de que la obra sea estrenada en septiembre en el teatro Olympia de Valencia, en donde dará comienzo su gira nacional bajo la distribución de la empresa Seda.

‘La gran depresión’, que fue estrenado el pasado mes de febrero en la isla majorera, se presenta el día 4 de junio en el Auditorio de Teror con todas las entradas agotadas desde hace más de tres meses.

Hay que recordar que el cineasta, director teatral, guionista y escritor canario Félix Sabroso (Gran Canaria, 1965) regresa a los escenarios teatrales con ‘La gran depresión’, un texto escrito hace once años junto a la que fuera su inseparable compañera, Dunia Ayaso, que coincide también en la cartelera madrileña con otra entrega suya, la comedia ‘La última tourné’, en cuyo cartel figuran Alaska, Manuel Bandera, Bibiana Fernández, Mario Vaquerizo, Marisol Muriel y Cayetano Fernández.

Es la primera vez que Nuria Roca, escritora, presentadora y actual colaboradora del programa ‘El Hormiguero’ que dirige Pablo Motos, se sube a un escenario para interpretar un papel. En esta comedia encarna a Marta que, junto a su amiga Manuela (Antonia San Juan) repasarán los avatares de sus vidas después de reencontrarse tras ocho largos años de separación que debilitaron la estrecha relación de amistad que siempre mantuvieron.

“Hay que tener en cuenta que las dos actrices pasan durante el transcurso de la función por todos los estados emocionales posibles”, explica Félix Sabroso, “y ambas lo hacen con admirable entrega hablándonos del empoderamiento desde el dolor o desde la infranqueable soledad. Una especie de juego de emociones llevado al extremo que pone aún más en evidencia las emociones de ambas”, concluye el director canario.