Dicha obra me dejó perplejo, la calidad de las curvas de sus mujeres, los rasgos de las caras de los hombres, la simplicidad en la posición de las esculturas. Ahora que estoy más entrado en años, tengo la oportunidad y el placer de conocer más a la persona que está detrás de ese monumento, de otros tantos monumentos y obras de arte, que ha hecho más bella varios de los rincones de la isla en la que resido.
Luis Alemán Montull nace en Las Palmas de Gran Canaria en enero de 1934. Se inicia en la escultura con tan solo 13 años con la obra de un cristo de casi dos metros. A partir de ahí empieza una de las carreras artísticas más conocidas y brillantes, si cabe.
Don Luis, ¿cómo se inicia en mundo del arte de la escultura y la pintura?
R: Yo comencé debido a que mi padre tenía un taller de ebanistería y era un ebanista muy bueno, bastante conocido en canarias. Desde los 7 años mi padre ya me inculcó a la talla de la madera. Yo estudiaba en el colegio y al propio tiempo pues ayudaba en el taller de mi padre. Mi padre me preparó una tarima para yo poder subirme y así tallar la madera. Con el paso del tiempo me empezó a entrar la idea de ser escultor. Según avanzaba en mis estudios en el colegio, comencé a estudiar historia del arte, autores como Miguel Ángel Buonarroti y un poco de todo, pues más fuerza cogía la idea de ser escultor. A los 13 años realicé mi primera obra, que es un cristo crucificado encargado por el capellán de la Casa Asilo de Nuestra Señora del Pino de las Palmas. Terminé mis estudios primarios a los 16 años, me fui a cursar estudios de aparejador en Barcelona, debido que en ese tiempo era más barato costearse los estudios de arquitectura. Al relacionarme con varios artistas catalanes, pues decidí que la arquitectura no era lo mío y me metí de lleno al mundo de la escultura.
Tengo conocimiento de que su padre al principio no estaba de acuerdo con que usted se dedicara al mundo del arte. ¿A qué pudo ser debido esto?
R: No es que a mi padre no le gustase el arte, en mi casa éramos mi hermana y yo. Mi padre siempre tuvo esa idea de que yo cursara estudios de aparejador, debido en gran medida al taller. Él quería que yo siguiera con la empresa familiar. Ya que era una empresa grande donde había muchos trabajadores, repartidos entre varias disciplinas, como tapiceros, ebanistas, carpinteros etc.
Usted ha pasado por Barcelona, por París, incluso por China y me imagino que por otros muchos países. ¿Se ha sentido influenciado por algo o por alguien en concreto a la hora de realizar sus obras?
R: Yo creo que no me he sentido nunca influenciado por nadie, ahora, si influenciarse es, haber visitado el Museo del Louvre de París y muchos más museos, entonces sí. Tu subconsciente va viendo varias obras de artistas, se va haciendo una mezcla y si tienes la suerte, que creo que tuve yo, que de todo eso salió mi estilo propio. Mi estilo de arte es una mezcla de estilos. Yo he estudiado mucho el arte egipcio, el asirio, he realizado incluso arte abstracto. Mucha gente que ven mis obras no se da cuenta, que mis obras es una mezcla de estilos, por ejemplo, si miras el monumento de la plaza de la victoria, le quitas las esculturas de las maternidades y nos encontramos con un monumento abstracto. Yo tengo obras barrocas, obras del renacimiento, en fin muchos estilos. Pero todas tienen un sello muy particular mío, las manos y los pies de las esculturas, son grandes, al igual que esas caras tan canarionas de las esculturas. Cuando estuve viviendo en París, los artistas que me conocían, me comentaban, Luis ¿Por qué arte abstracto? Montull, eso lo hace todo el mundo, usted tiene un estilo propio, eso es lo que le hará ser reconocido.
¿Cree que durante su estancia, tanto en Barcelona como en París, incluso en otros países, el arte que usted ha podido observar y contemplar es mejor que el canario o el arte canario tiene algo más especial?
R: El arte canario tiene algo diferente, es un poco de todo, tenemos a Jesús Arencibia por ejemplo, a Placido Fleitas, Placido tuvo una época de obras que parecen muy renacentista y luego obras muy modernas. El arte canario en mi opinión, es también una especie de arte africano más que indigenista, como muchos piensan que es el arte canario. Para mí, los indigenistas son: David Alfaro Siqueiros “El Mexicano”, José Clemente Orozco que también es mexicano. El arte canario es un arte africano mezclado con un arte más clásico en mi opinión.
He estado observando sus obras escultóricas y me he fijado que hay mucho del arte indigenista, igual me equivoco... ¿Cree usted que sus obras son de un estilo indigenista? ¿Qué estilo es el que más le llama la atención?
R: Mi estilo no es indigenista, si no no hubiera sido un Montull, porque el estilo mío no lo tienen otros artistas, con todo el respeto hacia ellos. Se me ha catalogado de artista indigenista debido al monumento que realicé en la Plaza de La Victoria, que se llama Actividades Primitivas Canarias. Yo he tenido la suerte de vivir la Canarias de antes como la Canarias de hoy, el cambio ha sido muy grande. Este tipo de personalidades que representan las esculturas de la Plaza de la Victoria los he visto yo. Esas personas de la agricultura en el campo canario, con los pies grandes y descalzas... Antiguamente en Canarias lo que había era la pesca, la artesanía y la agricultura, eso es lo que se me encargó en su momento que hiciera en la Plaza de La Victoria y de ahí que las personas me catalogaran de indigenista. Otra cosa que me gustaría matizar es que el indigenista es el monumento, no el artista.
Don Luis, usted aparte de la escultura, ha realizado pintura. ¿Es cierto?
R: Por supuesto, yo desde siempre y de pequeño, he dibujado muy bien. Realizaba dibujo para descansar de tanto trabajar la escultura. Cuando realizaba un monumento, en vez de trabajar siempre en el monumento hacía otro tipo de material para no caer en la monotonía; y para mí el pintar es ponerle color a los dibujos de hago... (se ríe el autor).
Sus esculturas en talla de madera tienen una gran calidad en cuanto al propio material del que está realizado, como en la genialidad de los detalles de la propia escultura. ¿Tales obras son fruto de su imaginación o ha utilizado modelos para llevarlas a cabo?
R: Tengo de todo, hay muchas esculturas realizadas por la inspiración y otras realizas ya utilizando modelos. No solo en la madera, sino en piedra y en alguna ocasión en la pintura. Yo tengo una serie de esculturas realizadas en madera, en homenaje a Isidora Duncan, que me dio por dedicársela a ella, y para poder realizar dicha serie hice obras desde mi imaginación y otras llegaron a mis manos desde unos bocetos que unos artistas franceses habían realizado sobre ella. En esta serie he utilizado tanto modelos como mi propia inspiración. Se expuso en el Centro Cultural de la Villa de Madrid, fui invitado por el Gobierno de dicha comunidad, por motivo del Festival de Danza Internacional del año 2000.
Con todos los años que ha estado en el mundo del arte, esculpiendo y pintando, ¿cree que el arte canario de hace muchos años atrás ha evolucionado hasta la época actual?
R: Yo he visto grandes artistas canarios de antes (por ejemplo Gregorio López, Placido Fléitas...) y hay artistas que a lo largo del tiempo han evolucionado y en conjunto del arte canario también ha evolucionado. Pero actualmente el arte ha pasado a ser abstracto, aunque para mí eso no es evolución. Por ello es que yo en mis obras he procurado hacer la mezcla del arte abstracto actual con el arte figurativo, porque creo que es más personal. Actualmente existen muchos artistas que se repiten en sus obras, al menos en mi forma de verlas... Porque ahora sí se cree que hacer arte actual es hacer arte abstracto, y para mí no. Yo encuentro más complicado realizar una escultura de una figura humana que hacer cuatro líneas. Yo creo incluso que hoy en día ningún artista canario ha superado a Néstor Martin de la Torre, que era un gran pintor y modernista.
¿Qué opina de los artistas de la actualidad en el mundo del arte canario como Manolo González, Juan Bordes, Manolo Marrero...?
R: Yo nunca suelo opinar sobre otros artistas. En mi opinión, cada artista realiza su obra y son los críticos y el público quienes deben realizar tal opinión sobre dichas obras. Yo no opino, porque luego se me puede malinterpretar.
¿Cuál es su obra culminante, la obra por la cual se siente más reconocido?
R: Te voy a contar una historia. Hace muchos años ya, hice una exposición en lo que hoy es el Cicar (que en realidad no era el Cicar, sino un hotel). Allí había un comedor grandísimo, precioso el suelo, de granito negro. La Caja de Ahorros, que venía de expropiar el hotel, organizó dos exposiciones, la primera de Jesús Arancibia y la otra mía. Hubo una exposición extraordinaria (puse obras de grandes dimensiones). En esos momentos en la Plaza de la Victoria no existía nada, más que arenales y poco más. Había un concejal que se llamaba Jesús Gómez (de Parques y Jardines en esos momentos) y tenía la plaza vacía. César Manrique quería hacer una escultura de arte abstracto como las de la isla de Lanzarote, y Jesús Gómez era muy canario y dijo que prefería poner una obra canaria. Claro, como yo estaba realizando la exposición en el Cicar y debido a su éxito, pues me preguntó: "Montull, ¿usted no puede hacer algo canario para la Plaza de la Victoria?" Le conteste que sí, preparé una maqueta y parece que gustó mucho. A Jesús Gómez le gustó tanto que decidió llevar adelante la obra de la maqueta que le había preparado. Ese fue el boom de Montull. El monumento a las Actividades Primitivas de Canarias, que sigue en el mismo sitio.
¿Cree que le falta algo para sentirse satisfecho en el mundo del arte? ¿O con la vida que ha llevado, artísticamente hablando, se siente completamente realizado?
R: Realizado hace años que me encuentro. Hombre, ¿que a lo mejor me hubiera gustado realizar otras obras más importantes? Pues sí, tenía un proyecto para Playa del Inglés (al Sur de Gran Canaria) que hubiera sido el monumento más importante de Gran Canaria, con 25 metros de altura y de piedra de Ayagaure, que se refería a toda la actividad del Sur de Gran Canaria. Una vez aprobado por Obras Públicas, por causas políticas no se pudo realizar. Esa es una de las cosas que me hubieran gustado terminar, la verdad es que fue una pena.
Con todas estas palabras, más me convenzo de la grandeza del artista que he entrevistado; sinceramente, no hay palabras para describir tantas buenas obras de arte que he visto, una vez entré tanto en el estudio del artista como en su casa museo de Fataga, a la que me invitó. Tanta genialidad, tantos materiales que han pasado por sus manos, desde la madera de ébano hasta el mármol de Carrara, un sinfín de obras de las que he disfrutado observándolas y contemplándolas. Don Luís Montull, el artista que tiene mucho que ver con el Luís Montull persona, ya que me abrió todas las puertas de su casa, como las de su estudio, su forma de ser tan abierta y discreto a la vez, tan orgulloso de sus obras, sin duda un artista que tiene que estar en los libros del arte canario.