De familia de rancheros, varios de sus hermanos también pertenecen a este colectivo. Simeón dominaba perfectamente tanto el canto por copla como por deshecha y su memoria y lucidez mental le permitían tener un gran repertorio de letras en su cabeza.
Hombre de mucho carácter, vivía y sentía el rancho como pocos y se preocupó por ayudar y enseñar a los que empezaban, así los nuevos cantadores de “alante" tienen una deuda de gratitud con él.
El entierro-funeral tendrá lugar en Arbejales (Teror) el 30-04-2014 a las 17:30 horas