‘Una arqueología de los márgenes. Colonialismo, amazigidad y gestión del patrimonio en las Islas Canarias’ (An archaeology of the margins. Colonialism, Amazighity and heritage management in the Canary Islands, Nueva York, 2014), es el título del último libro del investigador canario José Farrujia de la Rosa, doctor en Prehistoria por la Universidad de La Laguna y Miembro de la Sociedad Española de Historia de la Arqueología. El volumen acaba de ver la luz, en inglés y en formatos ebook e impreso, en el prestigioso sello editorial Springer, líder en el ámbito de las Ciencias Sociales a escala internacional.
La presentación del libro tuvo lugar en el Hunter College de la City University de Nueva York, el pasado 26 de abril y en el marco del I Congreso del Centro de Estudios Canarias-América (CECA), que coordinan los profesores María Hernández Ojeda, de la referida universidad, y Germán Santana Pérez, de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.
El CECA es el primer centro académico de Estados Unidos que se especializa en las relaciones entre Canarias y las Américas. Desde la mirada discursiva de la colonialidad del poder, este espacio tiene como meta explorar las conexiones históricas, culturales y literarias en el Atlántico de habla hispana, con un énfasis particular en los archipiélagos, incluidos la Macaronesia (Canarias, Cabo Verde, Azores y Madeira), las islas del Caribe y Guinea Ecuatorial.
La investigación desarrollada por Farrujia de la Rosa analiza los efectos del colonialismo y del etnocentrismo en la gestión del patrimonio arqueológico canario, factores éstos que han propiciado la recuperación de determinado tipo de yacimientos y la consiguiente recreación-invención de la identidad guanche. Procesos similares se documentan también en otros contextos del planeta donde el patrimonio indígena está igualmente infra-representado. Sin embargo, el caso canario presenta especificidades, pues en palabras del autor, ‘la gestión actual del patrimonio arqueológico canario se desarrolla en un contexto muy específico e inusual, dado que el Archipiélago se localiza en los márgenes de Europa, pertenece a España y por tanto a la Unión Europea, pero geográfica y arqueológicamente es parte de África’.
Desde una perspectiva teórica y práctica, el trabajo presenta distintas propuestas para poner en valor el patrimonio arqueológico de las islas, así como para propiciar la participación activa de la comunidad local y del turismo en el disfrute y en la propia difusión del patrimonio. Asimismo, la investigación aborda cuestiones relacionadas con la protección del patrimonio guanche a partir del estudio de diferentes parques arqueológicos de Canarias (La Zarza y La Zarcita, Belmaco, El Júlan o la Cueva Pintada de Gáldar), y explica cuál es la tendencia actual en la gestión del patrimonio en las islas y cuál es el marco legal en el que se inserta.
La monografía destaca y analiza también el caso de la isla de Gran Canaria, en donde las actuales políticas patrimoniales sí han propiciado la recuperación integral del pasado indígena, a diferencia de lo que sucede, por ejemplo, en Tenerife o en Fuerteventura. En estas islas, además, la especulación patrimonial ha puesto en serio peligro el legado indígena o amazigh, tal y como se pone de manifiesto en la ciudad de San Cristóbal de La Laguna, en donde el patrimonio no elitista, el indígena, no forma parte de los valores que definen la identidad del municipio, entre los que se encuentran su trazado urbano del siglo XV, sus ‘casas altas’ o sus palacios, elementos pertenecientes en su totalidad a la etapa colonial. Por su parte, en la Montaña de Tindaya, sus petroglifos, los conocidos podomorfos, corren el peligro de verse afectados ante el desarrollo del proyecto de Eduardo Chillida.
De forma paralela, la investigación de Farrujia considera el Archipiélago Canario como parte de una problemática que no es única sino que presenta paralelismos con otros casos como el canadiense o el australiano, en los que también está infravalorado el patrimonio de las sociedades indígenas. En este sentido, otra de las aportaciones del libro estriba en insertar el caso canario en el contexto internacional, pues actualmente se está asistiendo a la globalización de la gestión del patrimonio y de la propia arqueología.
En palabras del autor ‘el libro refleja cómo el curso de la historia y de las políticas del pasado tienen una importante influencia en la forma en que el patrimonio arqueológico se interpreta y gestiona hoy en día. En definitiva, la investigación analiza la realidad de un archipiélago como el canario, emplazado en los márgenes de Europa (de hecho, en el ámbito africano) y reflexiona sobre cuál es la finalidad y el rol de la arqueología en la actualidad’.
Desde el punto de vista gráfico, el libro cuenta con un apartado fotográfico de Tarek Ode en el que se recogen distintos yacimientos arqueológicos de las islas. Las imágenes contribuyen, sin lugar a dudas, a poner en valor el legado guanche en el contexto internacional en que se inserta esta publicación.