La plaza estará, como cada edición, esperando la aparición del Diablo, con la música de orquesta. Llegarán los fuegos y los cabezudos y gigantes.
Está previsto que el Diablo salga a las 2:30 horas de la madrugada aproximadamente, como cada año. Y llegará el alboroto de calor y fuego purificador entre el barullo gigante de las gentes atónitas.
Cada año hay una novedad, y en este caso es que hasta el último momento no se sabrá quién lo bailará en la plaza.