Sus sermones y novenas, predicados en diversas ocasiones y solemnidades, tienen diversas ediciones. Una de las varias novenas que predicó, con motivo de las fiestas de la Virgen del Pino, la de 1756, fue denunciada al Tribunal del Santo Oficio que informó en contra de ella y exigió fuera prohibida por el Tribunal de Canarias, dado que contenía proposiciones malsonantes que pudieran inducir a error y culto supersticioso. En 1767, publica Descripción de las fiestas de la dedicación del magnífico templo de Teror.