Consta de ochenta páginas que recogen textos (17 poemas) de Rafael Bento*, Romero Magdaleno*, Amaranto Martínez de Escobar*, José Plácido Sansón*, J.M. Marrero y Quevedo, Claudio F. Sarmiento*, Ventura Aguilar*, Alonso de Lara, Fernando Cubas, Juan Melo, Ricardo Murphy*, Fernando Siliuto*, José Benito Lentini*, Manuel Marrero Torres* y Fernández Neda*. La selección va precedida de una nota “A los lectores”, firmada por Carlos de Grandy*, presumible autor de la muestra, en la cual -a modo de prólogo- Grandy explica el propósito no sólo poético del Álbum: estimular, dice, el civismo, consignar la producción de nuestros literatos; de ahí que subraye el carácter específicamente canario de la obra, expresión de “nuestra civilización pasada y nuestra civilización presente”. Sigue un texto en prosa (con retrato del prócer) de ofrecimiento a Francisco María de León Falcón, impulsor de los ideales que motivaron la antología. El Álbum se cierra con un soneto inacabado, del cual tampoco se cita al autor. Hoy se sabe que se trata de “A Emilia”, de Manuel Marrero Torres. La repentina desaparición del periódico dejaría incompleta esta amplia muestra poética, para el profesor Joaquín Artiles* una afirmación colectiva que simboliza la consagración del Romanticismo en Canarias. Como quiera que los poetas reunidos proceden tanto de Gran Canaria como de Tenerife, el Álbum es considerado por los más como la primera antología poética del Archipiélago.