Una lectura dramatizada del Don Juan Tenorio de Zorrilla en el Gabinete Literario pondrá mañana lunes, 31 de octubre, la nota literaria a una jornada, víspera de los difuntos, en la que la ciudadanía se convierte en protagonista de la fiesta en la calle.

Bajo la dirección de Rafael Rodríguez, de 2RC Teatro, el músico Carlos Oramas, el humorista Paco Santana, de Piedra Pómez, el coreógrafo Anatol Yanowsky,  los periodistas Santiago Morollón, jefe de informativos de COPE, Kiko Barroso, director y presentador de Roscas y cotufas, de Canarias Radio la Autonómica, Jazael Ascanio, de Antena 3, y Nayra Collado, de Televisión Canaria, el alcalde de Arucas, Ángel Víctor Torres, y la concejal de Educación, Cultura y Deportes del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, María Isabel García Bolta, serán, a las 19:00 h., los encargados de interpretar a los personajes más significativos de esta obra que cuenta con la colaboración del Gabinete Literario y Amigos canarios de la Ópera.

Además, en la calle, un pasacalle de grupos folclóricos, un gran asadero de castañas y piñas al ritmo de un baile de taifas y una degustación de vinos dulces llenarán las calles de Vegueta para recordar a los difuntos siguiendo nuestra tradición. La Asociación Casco Histórico Vegueta-Triana La Unión, organizadora desde hace doce años de este acto, se une así a la propuesta del Ayuntamiento de sumarse al evento De finados y donjuanes.

A las 19:30 h., nueve grupos folclóricos -Parranda La Vega, Tierra Guanche, Cuerpo de baile Miguel Gil, las parrandas La Unión, Cono Sur Ahoren, El Valle los Nueve y El Estacato, Cho Juá y Puente Palo- iniciarán su recorrido por distintos emplazamientos de Vegueta, Espíritu Santo, Santa Ana, Pilar Nuevo, entre otros, para reunirse en torno a las 20:30 h. en la plazoleta Andrés Déniz El Ratón, en el cruce de las calles Botas y Mendizábal. Allí dará comienzo un asadero popular de castañas y piñas al ritmo de un baile de taifas. El vino dulce servirá para animar las almas de los asistentes a la fiesta.

Tradiciones, folclore, literatura y teatro se dan la mano en Las Palmas de Gran Canaria para recordar a los finados y recuperar así parte de nuestra cultura.