Morfema presenta esta semana en el Teatro Leal de San Cristóbal de La Laguna (Tenerife) un espectáculo de teatro musical para niños titulado Cantos Canarios. Se trata de un homenaje a Teobaldo Power en el que la compañía teatral conjuga la música clásica con la tradición folclórica de las Islas para acercar al público infantil a la vida y obra del compositor canario.
De esta forma, el Teatro Leal acogerá tres funciones consecutivas del espectáculo Cantos Canarios, mañana martes 26 de octubre, así como los días 27 y 28 de este mismo mes, a las 11:00 horas.
Fundada en 2003 por Ricardo del Castillo, actor y autor tinerfeño con más de 20 años de experiencia profesional, Morfema realiza espectáculos para todos los públicos, teniendo especialmente en cuenta a los jóvenes, con predilección por adaptar textos de la literatura clásica. La compañía describe Cantos Canarios como un espectáculo divertido, dinámico, arriesgado e innovador donde se mezclan el trabajo audiovisual del varias veces premiado Alejandro Gil con la dirección y creación musical del tinerfeño Miguel Jaubert, insipirada en la obra de Teobaldo Power e interpretada por los actores y cantantes Sara Nanpeh, Roberto Matchez y Fidel Galbán. El texto y la dirección son de Ricardo del Castillo.
El objetivo de este espectáculo es que los niños conozcan la biografía y obra musical de Teobaldo Power, inspirador autor del Himno de Canarias, así como que se acerquen también a la literatura popular canaria y presencien un espectáculo teatral donde también predomina la música culta y popular. Se trata, asimismo, de transmitir valores que caracterizan a la sociedad canaria a través de las personas que han sido sus artífices a lo largo de la historia.
La obra cuenta la historia del compositor Teobaldo Power que acude al monte de Las Mercedes, buscando la inspiración en el paisaje de su tierra. Los personajes del bosque de laurisilva y el canario Kraus aparecen en su ensueño para susurrar en sus oídos los aires de la tierra, el dulce canto con el que las madres canarias mecen a sus hijos o el son más alegre de los bailes populares. Así, la imaginación de Power ve pasar las aldeas humildes y los campos risueños, las desenfadadas alegrías en los días de fiesta. Pero antes ve pasar los recuerdos de sus viajes y experiencias en su recorrido vital, desde su niñez hasta el momento presente.