Desde el pasado día 20 se vienen celebrando variados torneos de juegos de mesa y deportes, y fue ayer jueves, 26 de agosto, cuando se izaba la bandera que oficialmente daba comienzo a los actos. A reglón seguido, eran inauguradas diferentes exposiciones en salteados rincones del lugar. Así, es hoy viernes 27, a las 21:30 horas, cuando se lleva a cabo uno de los actos principales del programa: la Fiesta de Arte, este año con el título de Tijarafe y el mar, en la Plaza de Nuestra Señora de La Candelaria, recordando la historia vinculada al mar de los tijaraferos y las tijaraferas.
El martes 31 estará, como no podía ser menos en el verano festivo de Canarias, Pepe Benavente. El jueves 2, a las 18:30 horas, será la peregrinación desde la Iglesia Nuestra Señora de Candelaria a la Cueva de la Virgen, donde se celebrará una Eucaristía. A continuación la merienda será colectiva. Y en este mismo día, ya entrada la oscuridad, tendrá lugar la Noche de Tradición Canaria, con Baile de Taifa, Parrandas y degustación de productos de la tierra en la Plaza de La Paz.
Al día siguiente, el viernes 3, serán degustados vinos de tea del municipio, abriendo boca a un acto histórico en la cuna de la décima improvisada palmera: el XL Festival de Punto Cubano, con poetas de la orilla atlántica y de la orilla americana. A las 21:00 horas en la Plaza de Nuestra Señora de La Candelaria. Todo un acontecimiento para los que allí puedan estar.
Al día siguiente es la romería, donde se premiarán los balcones y la pareja mejor ataviados. El domingo 5 se encontrarán las Bandas de Música de Tijarafe y Puntagorda.
Llega el Diablo.
No será hasta el martes 7 de agosto, más bien en la madrugada del 8, a las 02:30 horas, después de la nocturna verbena, cuando se pueda ver al atractivo Diablo de Tijarafe en la misma Plaza de La Candelaria, acompañado de mascarones y adornado con los fuegos más llamativos para el multitudinario personal presente. Aquí ha pasado como en tantos otros lugares de Canarias: el evento llama tanto la atención por su espectacularidad que, aunque no son las Fiestas del Diablo, sino de la Virgen, ya se conoce así en muchas bocas a las Patronales de Tijarafe.
La emoción se desborda. La hora ha llegado. Un elemento que también aporta más tensión a esos instantes es el hecho de que nadie, excepto los miembros de la organización, sabe por dónde va a hacer su aparición el Diablo. Es una sorpresa y el secreto se guarda hasta el final.
De repente, entre los claros y las sombras de la plaza, surge la diabólica figura negra de grandes ojos rojos llamativos. El griterío de la sorprendida y asustada concurrencia es ensordecedor mientras la música de la orquesta arrecia con sus mejores piezas. El Bicho entra en la plaza escoltado por un grupo de voluntarios, a modo de cordón de seguridad, que trata de velar por que el acto se desarrolle según lo previsto, sin incidentes. Cada año se convierte en una tarea más difícil, por la aglomeración de público dentro del recinto.
Una curiosidad de este año es que parecer ser que se estrena una nueva cerveza negra con la marca del Diablo. Sea como sea la atracción, habría que valorar hasta qué punto es significativa la aportación de un recurso gastronómico sin ningún tipo de vinculación con la tradición del pueblo palmero.
La Danza fue declarada Bien de Interés Cultural en 2007.
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