Llegaron en multitud los vecinos desde el casco de Guía, desde Montaña Alta, de Gáldar y hasta de La Aldea, y sonaron los tambores y caracolas, anunciando que era el tiempo de cumplir las promesas.
Así lo hizo Emilia Miranda, que lleva tres años subiendo a la cima de Vergara, para cumplir con su voto, igual que lo hicieran los antepasados, a la Virgen de Las Marías.
Por primera vez subió Anjara Araujo, acompañada de su hijo Yedey, que con tan solo tres años ya es la segunda Rama que baila a la Virgen.
Y no faltó Diarelys Estévez, que a sus cinco años ya lleva tres haciendo el camino de Las Marías, con su caracola al cuello, que aprendió a tocar ella solita...
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