No se ha promovido y ni siquiera permitido la participación de la prestigiosa comunidad científica canaria en tema como este, en el cual tienen toda la legitimidad moral y conocimiento necesarios. Esta ley se ha promovido también a espaldas del propio Servicio de Biodiversidad del Gobierno de Canarias, que llevan años haciendo el seguimiento y el estudio de las especies amenazadas de Canarias. Cuatro Cabildos Insulares (Fuerteventura, El Hierro, La Gomera y Gran Canaria), dos de ellos gobernados por el mismo partido político que promueve la ley, han presentado mociones en contra del nuevo catálogo, hecho que no ha tenido trascendencia en las votaciones, lo cual desde el punto de vista de representatividad y legitimidad es claramente contradictorio.

Decenas de organizaciones sociales y miles de personas han manifestado su rotunda oposición y han solicitado la retirada de la proposición de ley por carecer de rigor científico sin tener ningún efecto sobre los que se hacen llamar nuestros representantes.

El presente catálogo que supuestamente debe ser complementario al Catálogo Nacional se ha adelantado a la actualización del Catálogo Nacional de rango superior y por tanto vinculante, propiciando vacíos legales a corto plazo y futuras contradicciones entre ambos catálogos.

Para Ben Magec Ecologistas en Acción el contenido del catálogo es un verdadero disparate desde el punto de vista de interpretación y la conservación.

Se pasa de 450 especies amenazadas reflejadas en el catálogo del 2001 a tan solo reconocer como amenazadas a 137 especies (83 en Peligro de Extinción y 54 como Vulnerables). Anexo 1 y 2.

Se inventan dos nuevas categorías no recogidas en la Ley de Patrimonio Natural y Biodiversidad (de Interés para los ecosistemas canarios y la de Protección Especial, no consideradas como especies amenazadas), donde se incluyen 166 especies, de las cuales están incluidas en la perversa categoría de Interés para los Ecosistemas Canarios 149 especies que solo estarán protegidas si están dentro de un Espacio Protegido, siempre y cuando no haya un proyecto de interés público, poniendo en peligro el riquísimo patrimonio natural del Archipiélago que es, además, una excepcional aportación a la riqueza medioambiental del Planeta. La única justificación de esta nueva categoría es la de salvar los obstáculos legales de determinados proyectos de dudoso interés público sin tener que salvaguardar la conservación de determinadas especies incluidas en la presente categoría. Sirva de ejemplo las desprotección de los Sebadales para construir el Puerto de Granadilla. Anexo 3 y 4.

Por otro lado, en el actual catálogo se estable un anexo de carácter especulativo, donde se vislumbran claramente las intenciones de rebajar la categoría de protección de 58 especies respecto al grado de protección contemplado en el actual catálogo nacional pendiente de actualización. Anexo 5.

En el Anexo 6 se establecen 58 especies a las cuales no se le asigna ninguna categoría de protección.

En resumidas cuentas, la Ley que define el Catálogo Canario de Especies Protegidas es un verdadero despropósito democrático, sin ningún tipo de consenso, y supone un grave retroceso en la conservación de las especies en Canarias, lugar reconocido internacionalmente por sus valores en biodiversidad, Valores no reconocidos tristemente por nuestros gobernantes, que siguen apostando por el mismo modelo depredador del territorio a costa de la preservación de nuestro patrimonio natural para las generaciones venideras, haciendo prevalecer determinados intereses privados frente a la voluntad popular.

SÍ A LA PRESEVACIÓN DE LAS ESPECIES. NO AL CATÁLOGO DE COALICIÓN CANARIA