Aprovechando la caída de la tarde, y con ella el momento en que la luz oblicua facilita la visión de los pliegues y rugosidades en las rocas, el Cabildo de Fuerteventura organizaba una visita con los medios de comunicación para conocer el desarrollo del proyecto de Catalogación y divulgación de los grabados rupestres de Fuerteventura, que impulsa la Consejería de Cultura y Histórico del Cabildo en el marco de un convenio de colaboración con La Caja de Canarias.
La visita tiene lugar en algún punto del complejo montañoso de Betancuria, donde se encuentra una de las estaciones de grabados podomorfos -con forma de pie- más recientes. Su descubrimiento data del año 2007, cuando se localiza por primera vez con la Revisión de la Carta Arqueológica de Betancuria, y asociado a un interesante yacimiento arqueológico ya conocido e incluido en la Carta Arqueológica Insular.
Los responsables de la empresa Arqueofuer, encargada de la realización del proyecto, guían a una comitiva en la que se encuentran el presidente del Cabildo de Fuerteventura, Mario Cabrera, y la consejera de Cultura y Patrimonio Histórico, Genara Ruiz.
La consejera explica cómo el proyecto se está desarrollando durante nueve meses alrededor de las 20 estaciones de grabados más importantes de Fuerteventura. La Carta Arqueológica Insular, finalizada en 1994, cuenta (con la incorporación de descubrimientos posteriores) con un total de 54 de estas representaciones inventariadas, "de manera que había llegado el momento de revisar el estado de conservación de los grabados y poder establecer las medidas de protección más convenientes para cada caso, siempre a partir de las conclusiones de los estudios".
Por su parte, Mario Cabrera destacó que "nos encontramos ante una iniciativa que nos va a permitir avanzar en el estudio y divulgación del patrimonio arqueológico de la isla. Para ello contamos con el trabajo de una empresa joven y dinámica, pero también con experiencia en el mundo de la arqueología, pues fueron ellos quienes localizaron esta misma estación hace poco más de dos años. Ahora mismo se encuentran realizando un estudio alrededor de la periferia de la estación, de manera que no quede ningún posible motivo asociado sin investigar".
El técnico responsable de Arqueofuer, José Luis Brito, habla de cómo los resultados de las investigaciones permitirán definir la mejor manera de conservar las estaciones de grabados, y también establecer propuestas para su divulgación. "Existen estaciones que por su ubicación y estado de conservación pueden ser habilitadas para su visita, con las correspondientes medidas de protección. Otras, sin embargo, debido a su fragilidad, deben también darse a conocer pero a través de otras fórmulas como la reproducción".
El legado histórico majorero, en lo que respecta a la cultura aborigen del pueblo maho, cuenta con interesantes y variadas representaciones, todas ellas datadas entre el siglo III después de Cristo y el año 1404, en que se fecha la llegada de la cultura normanda. La arqueología preeuropea es sin duda uno de los aspectos más fascinantes y enigmáticos de nuestro patrimonio cultural.
Estación BTA046. La estación de grabados que acogía la visita, denominada BTA046 y localizada en la zona de Las Peñitas, cuenta hasta el momento con ocho paneles (láminas de piedra) con grabados localizados, algunos con uno solo y otros con varios podomorfos. Además de los podomorfos, se han encontrado también otros grabados en forma de círculo con radios en su interior, y algún otro cuya forma está por determinar. BTA046 es una de las cuatro estaciones de grabados localizadas en Betancuria.
Tipos de grabados. Según los investigadores, los grabados rupestres se pueden clasificar en grupos, denominados Geométricos (rectilíneos, curvilíneos, estelas, retículas, espigas, cuadrados, triángulos), Podomorfos (con forma de pie), Naviformes (representativos de embarcaciones), Juegos (asociados a los pastores), Cruciformes (en forma de cruz) o Alfabéticos (en los cuales entrarían las inscripciones líbico-bereberes y las pseudolatinas).
Metodología. Los trabajos a desarrollar en este proyecto deben contar con una documentación en profundidad cada una de las estaciones de grabados, lo cual implica estudiar con minuciosidad las técnicas de ejecución utilizadas, analizar las inscripciones, encontrar su posible relación otros motivos, ubicar las estaciones cartográficamente o valorar también su estado de conservación con respecto a la realización de la Carta Arqueológica Insular. Toda esta información se introducirá en una base de datos creada para tal fin.
Carta Arqueológica Insular. El Departamento de Patrimonio Histórico del Cabildo elaboraba la Carta Arqueológica Insular entre los años 1984 y 1994. El documento recoge, entre otras manifestaciones, las características, la localización y el estado de conservación de las estaciones de grabados rupestres de Fuerteventura. Con la inclusión de los descubrimientos posteriores a 1994, la Carta cuenta en la actualidad con 54 estaciones registradas.
No todos los grabados son aborígenes. Cabe destacar que, en el catálogo de grabados rupestres, aunque son la mayoría, no todos los grabados han sido atribuidos a los antiguos mahos. También algunas de estas estaciones se asocian a manifestaciones correspondientes a los pastores de después de la Conquista, que han sido incluidos en la carta por su estimado valor etnográfico.
Interpretación. Las interpretaciones dadas sobre el significado de los distintos grabados han sido muchas y variadas. Las estaciones más controvertidas y estudiadas han sido las alfabéticas y los podomorfos. Los enigmas que guardan, al no haber podido ser descifrados todavía, han llevado a numerosos estudiosos a formular diversas hipótesis sobre las poblaciones que los ejecutaron.
Objeto de la Catalogación. El proyecto Catalogación y divulgación de los grabados rupestres de Fuerteventura consta de dos partes. La primera parte está encaminada a la catalogación de las estaciones de grabados de la isla, al objeto de su protección, conservación y gestión por parte de la Administración, y la segunda tiene como objetivo la creación de una Guía al objeto de dar a conocer los grabados rupestres, motivar su preservación y resaltar la gran cantidad de sitios con manifestaciones rupestres de la isla.
Divulgación. El proyecto cuenta con una segunda parte dedicada a la divulgación del patrimonio arqueológico insular, que se concretaría en la creación de una Guía descriptiva de los grabados rupestres de Fuerteventura. Con toda la información recopilada, esta guía funcionará como una fuente de conocimiento accesible que arrojará nueva luz sobre la gran cantidad de manifestaciones rupestres que salpican la orografía majorera.
Financiación. El proyecto Catalogación y divulgación de los grabados rupestres de Fuerteventura cuenta con un presupuesto de 30.000 euros, que aporta La Caja de Canarias dentro de un convenio de colaboración firmado por el Cabildo de Fuerteventura.