La obra lleva por título Gara, la hija de Aluce y está escrita por Antonio Víctor Suárez Vera, que narra la vida y las circunstancias que rodearon a los antiguos pobladores de La Gomera en las proximidades de Puntallana, uno de los parajes más emblemáticos y místicos del municipio de San Sebastián.

Según se recoge en el prólogo del libro, se trata de una narración popular de una leyenda tan antigua que nadie puede datarla con exactitud, pero que, sin embargo, aglutina historias que componen el devenir de los pueblos y de las que La Gomera está llena, aunque en este caso ha sido enriquecida con valores culturales transmitidos generación tras generación y se presentan siempre de forma abierta a la imaginación del lector.

Gara, la hija de Aluce recopila diversos relatos que recuerdan a los hombres y las mujeres que con sus ganados recorrían la Isla e invita a reflexionar sobre sociedades pasadas, al tiempo que describe las singularidades del paisaje insular.

Desde el área insular de Cultura se apunta, asimismo, que estamos ante un relato sencillo al que no le falta interés, dado su reflejo de un pasado ya lejano, en el que se forjaron muchas de las tradiciones que han sobrevivido hasta la actualidad; se hace hincapié en la importancia de recuperar relatos y ayudar a la conservación de la historia.