La isla de Gran Canaria, con sus 1560 Km² de superficie y su altitud de 1949 metros, alberga, sin duda alguna, una diversidad de paisajes única en el Archipiélago.

Aunque hay que reconocer que, por desgracia, la isla no está lo suficientemente cuidada y mimada por nosotros, los grancanarios, esta nos regala una gran variedad de ecosistemas, así como un espectacular relieve, fruto de la actividad volcánica que la formó y de la acción de los agentes erosivos, que se han encargado de esculpir la isla, ofreciéndonos desde los más abruptos barrancos y acantilados, al remanso de inmejorables playas.

De los treinta Espacios Protegidos por Ley que tiene la isla, el Parque Natural de Tamadaba es uno de los más emblemáticos. Una gran cantidad de senderos nos dan la posibilidad de conocer este espacio... Este es uno de ellos.

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