Ahora, en el uso del color, ha manifestado igual maestría, con una magnífica combinación de los colores planos en la expresión de sus personajes canarios.
Entre las exposiciones que ofreció Eduardo hace unos diez años -en una línea deformada, de molde expresionista- y esta última, en la que sin perder la proyección expresionista, el trazo es estrictamente geométrico, situando y deslindando perfectamente el color, media toda una evolución en la que se desarrolla una perfecta síntesis del humor canario, de la que nuestro Cho-Juaá se nos aparece como genial creador.
Los grabados recogidos en estas páginas corresponden a acuarelas y guaches de distintas épocas: exposiciones exhibidas en el Gabinete Literario (1962), El Cenobio (1968), Circulo Mercantil (1974), así como tres viñetas características del humorista canario.
Este artículo ha sido previamente publicado en el número 51 de la Revista Aguayro, editada por la Caja Isular de Ahorros de Gran Canaria en mayo de 1974.