El grupo de espeleología palmero Tebexcorade ha descubierto en la costa de Mazo una cueva con restos de 30 lagartos gigantes, lo que constituye el mayor yacimiento paleontológico de restos de lagartos gigantes extintos encontrado en la Isla, según afirma Daniel Gómez, una de las personas que ha localizado el hallazgo.

La cavidad encontrada es muy húmeda y mide unos 70 metros de largo. La mayor parte de la misma parmaneció intacta desde su origen y ha sido abierta ahora para la investigación.

La cueva está muy bien conservada y presenta formaciones geológicas características como estafilitos de gran tamaño, flores de yesos y aproximadamente hay treinta esqueletos de lagartos gigantes incluyendo uno que conserva prácticamente intacto, en estado semifósil, los restos del estómago o, lo que es lo mismo, el contenido gástrico del lagarto.

En la cavidad también hay restos arqueológicos con cerámicas de dos fases diferentes, siendo el estado de conservación muy bueno porque, explica Daniel Gómez, "la mayor parte de la cavidad desde su formación geológica permaneció cerrada, por lo tanto la actividad antrópica del hombre no modificó ni el contenido geológico ni el contenido biológico de la misma".

La importancia de este hallazgo radica en que hay muchos restos intactos donde se puede observar toda la estructura esquelética del lagarto, así como restos de su alimentación.

No obstante, su relevancia tendrán que determinarla ahora los paleontólogos. En este sentido, Daniel Gómez informó de que "ya estamos en contacto con paleontólogos de la Universidad de La Laguna para que nos indiquen cómo recoger las muestras para poder enviárselas".

"Ya hemos recogido -indicó- los datos topográficos para levantar el plano de la cavidad y el siguiente paso es iniciar estudios biológicos de la misma con el trampeo por parte de biólogos que pertenecen al grupo de espeleología, como son Rafael García Becerra y Francisco Govante".

Si bien no es la primera vez que se encuentran restos de lagartos gigantes en la Isla Bonita, sí es la primera ocasión en que se descubre una agrupación de lagartos gigantes. "Hasta ahora -dice Gómez- se habían encontrado algunos esqueletos diseminados, pero nunca grandes grupos como éste y siempre en peores condiciones, porque, en general, se trataba de cuevas de fácil acceso para el ser humano".

Precisamente, el hecho de que esta cavidad esté localizada en un lugar con un acceso complicado ha garantizado la conservación de este yacimiento, que revela la presencia del lagarto gigante en la Isla, al igual que en La Gomera o en El Hierro, y hace pensar en la posibilidad de que en zonas alejadas de núcleos urbanos y de zonas de tráfico urbano puedan existir todavía hoy ejemplares de esta especie.

"No podemos decir que es imposible encontrarlos puesto que se han localizado lagartos gigantes en La Gomera, en los Roques de Anaga, y también en El Hierro", apostilla Daniel Gómez.