Revista nº 1040
ISSN 1885-6039

El Punto Cubano y la frágil memoria

Miércoles, 08 de Septiembre de 2004
Yeray Rodríguez
Publicado en el número 17

El cultivo en nuestra tierra de tradiciones como la del punto cubano nos encara con el discurrir de nuestra historia como pueblo: la esencia de nuestro pasado y los retos de nuestro presente y futuro.



A finales del mes de junio viví una experiencia especialísima. Dentro de los actos de la fiesta de San Juan el punto cubano convocó en la calle Mendizábal, en Vegueta, en Las Palmas de Gran Canaria a numeroso público de edades diversas que se implicó de tal manera en lo que allí estaba pasando que rompió las fronteras entre los que cantaban y los que oían. No miento si les digo que ha sido una de las ocasiones en las que con mayor satisfacción me he bajado de un escenario; pero no por mí, no por mero prurito personal; fueron las circunstancias que allí concurrieron las que me ensancharon el alma definitivamente.

Primeramente estábamos en la ciudad; una tradición incrustada profundamente en el campo canario bajaba para asomarse sin tapujos a las calles del barrio antiguo de la capital; en segundo lugar cantamos para gentes de todas las edades: personas maduras que sin duda conocían el punto cubano compartían perspectiva con algunos jóvenes que probablemente asistían por primera vez a una sesión de improvisación.

Pero había una circunstancia más importante (y no quiero que piensen que este texto es mero empalago personal) y ésta era que el puñado de gentes que se reunió en la frontera entre aquellos sábado y domingo, se reunió a escuchar algo que tiene carta de naturaleza en nuestra tierra porque hubo un tiempo en el que salían barcos cargados de canarios con el único equipaje de su miseria y entonces, créanme, me vino al pensamiento una imagen: la de un grupo de africanos atemorizados en una barquilla milagrosa que alcanza nuestras costas; y esa imagen no era azarosa: si hoy el punto cubano, la improvisación o el canto de décimas acompañado de las cuerdas tiene arraigo en nuestra tierra, fue porque la necesidad de subsistencia le echó una mano, sin saberlo, a la necesidad que tenemos los humanos de encontrarnos.

Si hoy la gente aplaude a un verseador cuando termina una décima, sin saberlo, está aplaudiendo, como me gusta decir, a todos aquellos verseadores anónimos que no tuvieron más escenario que los campos de tabaco o de caña de La Perla del Caribe, a aquellos que hoy serían llamados inmigrantes ilegales y que en aquel tiempo tenían el mismo miedo al océano que hoy tienen los que tocan a nuestra puerta. La tragedia de la emigración, la desgracia de no poder seguir viviendo allí donde vivieron los padres y los abuelos de uno, esconde pequeñas magias, y el punto cubano es una de ellas. Emigrantes fueron también aquellos que seguían golpeando sus tambores a orillas del Mississippi mientras los patrones blancos los golpeaban a ellos, emigrantes fueron los acordeones alemanes que dejaron las polkas y las cervezas del centro de Europa para ir a bailar vallenato y a beber aguardiente en la Colombia costeña, o el propio laúd, que sin dejar de ser árabe, es también español y cubano. La interculturalidad, la invitación a mezclar lo de cada uno para que sentir como propio lo de todos: echa raíces en la improvisación.

Dos tradiciones son una. A un lado y otro del inmenso Atlántico, en el Escorpión de las Afortunadas y en el Caimán de Las Antillas, hay seres que se parecen más de lo normal. El debate ha sido continuo: el punto cubano vino, se fue, llegó, estaba... Yo creo que no conviene gastar fuerzas en esa polémica, sino dejarlas en la lucha por la persistencia de algo que debemos sentir como nuestro y que nos recuerda constantemente que todos somos de todas partes. En el caso concreto de las estrechas relaciones entre Canarias y Cuba, a veces tratadas tan alegremente, aflora este género quizá como el más robusto testimonio de esa igualación de diferencias. Las sorpresas son continuas.

De pequeño escuché de boca de pastores o campesinos de Artenara décimas que después he leído en recopilaciones cubanas o también como testimonio oral de amistades caribeñas; muchos de esos canarios que sabían décimas, conocían sin haber estado allí la geografía cubana y para corroborarlo había siempre una décima: Canto aquí, canto en la Habana / canto en el Pinar del Río...

Revisar un inventario de poetas o músicos campesinos profesionales cubanos es encontrarse con la sorpresa de nombres y apellidos que nos resultan especialmente próximos: Guillermo Sosa Curbelo, Gustavo Tacoronte, Pablo Marrero, Orlando Laguardia Oramas... Y después están los gestos, los comportamientos de dos colectivos, los campesinados canario y cubano que ya no sabrían diferenciarse.

La memoria hoy es frágil. Olvida pronto lo que nuestro ha sido. Pero ahí están tradiciones como la del punto cubano para recordar que hubo un tiempo donde éramos recibidos y no recibíamos, donde no pertenecíamos al primer mundo y donde Europa y España nos abandonaron a nuestra suerte porque no había tanto cemento sobre nuestras islas. Hoy más que nunca el planeta ha de mezclarse: mañana, afortunadamente, habrá otros tesoros, como el punto cubano que asomarán tras la tragedia de abandonar la casa. (Este texto es un extracto del que fue leído en el Patio de las Culturas, en Vegueta el pasado 2 de julio, en una iniciativa que apuesta por los valores de la interculturalidad, circunstancia que agradezco personalmente a sus organizadores)

NUESTROS VERSEADORES
Lalo Martín Eladio Martín Bienes, que así se llamaba, era natural de Fuencaliente, municipio palmero cuna de otros verseadores. Siempre destacó Lalo por el cultivo del humor, de la picardía en la improvisación. Cantaba habitualmente con los verseadores palmeros y tuvo la oportunidad desde el año 1992 de compartir escenario con repentistas cubanos, falleciendo a finales de esa misma década. Su hijo Miguel Martín recopiló una serie de grabaciones de Lalo que publicó con el título: Lalo Martín. Puntos cubanos y controversias. El poeta más humorista de Canarias.

De esa grabación extraemos un fragmento en el que escuchamos una décima recitada y otras improvisadas en la Plaza de Candelaria, en Tijarafe, con el cubano Raúl Herrera. Escuchar el Fragmento.

LA DÉCIMA EN NUESTRA AMÉRICA. PANAMÁ
En Panamá, la décima, el canto de mejorana, goza de gran popularidad. Hay un importante número de improvisadores en aquel país y son seguidas con fervor las cantaderas, que así se llaman las actuaciones en las que la décima es protagonista. La mejorana es el instrumento característico y los diversos patrones musicales reciben el nombre de torrentes.
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Comentarios
Miércoles, 25 de Agosto de 2010 a las 13:27 pm - orlando laguardia

#15 FUE UNA DICHA DAR CON ESTE REPORTAJE IGNORADO POR MÍ Y FE

LICITO A TODOS LOS QUE TUVIERONQUE VER CON EL MISMO ESTÁ MUY BUENO, Y LOS ELOGIOS A YERAY MUY MERECIDOS GRACIAS A NOMBRE DELA´DÉCIMA

Martes, 10 de Junio de 2008 a las 22:29 pm - interesado

#14 me caen bien los de la revista

Miércoles, 28 de Mayo de 2008 a las 12:28 pm - Ana Díaz

#13 Enhorabuena por la revista, necesitábamos algo así para que no se pierda nuestras tradiciones y costumbres, muchas felicidades.

Sábado, 12 de Enero de 2008 a las 00:08 am - Marleni. Décimas de Adrián Candelario, mi padre.

#12 Desde muy remoto tiempo

es la décima o cuarteta

la forma con que el poeta

expresa su pensamiento.

El eco de su lamento

se pierde en la lejanía,

se distancia la alegría

de su sentir y querer

al ver desaparecer

la lírica poesía.

En fiestas la poesía

alegra la concurrencia

aquí por su trascendecia

suele usarce todavía.

Es una mitología

que se aleja presurosa,

es la rima de la prosa

que en el pensamiento cruza

y el poeta con su musa

va dibujando las cosas.

En el grande o el pequeño

fue símbolo de alegría

porque es la poesía

el despertar de sus sueños.

Era en festejos isleños

el número preferido,

ya todo esto se ha perdido

porque el poeta se oculta,

la espinela se sepulta

en las sombras del olvido.

La poesía en forma vaga

ya sólo llega a tu mente

como luz resplandeciente

que lentamente se apaga.

Este canto ya no halaga

lo que fue deja de ser,

vemos desaparecer

algo que fue tan bonito

sólo quedarán escritos

en memoria de ese ayer.

Hoy te vemos en tu ausencia

sin esperanza ninguna

son estas islas la cuna

de tu primera existencia.

Poetas no da la ciencia

esto es algo hereditario,

fue la alegría de los barrios

y es triste que se derrumben

tradiciones y costumbres

de nuestro pueblo canario.

Queda en lo sentimental

el recuerdo de otros días

porque es la poesía

el sentir espiritual.

Ese poeta genial

pasará a lo legendario,

de nuevo en los escenarios

debe oirse su trovada

y revivir en la alborada

de nuestro Folklor Canario.

Lunes, 24 de Diciembre de 2007 a las 19:27 pm - CONCEPCIÓN CASTILLO VÁSQUEZ

#11 En las cantaderas populares, están las verdaderas raíces del panameño que através de su canto o versos, envía un mensaje claro del significado de patria. En cada frase, en cada verbo y palabra, están los verdaderos escombros de nuestra patria.

Lunes, 28 de Mayo de 2007 a las 18:44 pm - yolima

#10 hola soy colombiana del departamento del cesar,serca a valledupar,vivo en las palmas de gran canaria y veo un reportaje de vegueta de colombianos costeños,quisiera contactarlos y ver si existe una asociacion de colombianos sobre todo de la costa, me case con un canario y quiero encontrar aca gente de m pais, soy una versiadora de la musica vallenata,he estado en eventos con rafael escalona, villazon y poncho zuleta,no hago decima solo versos de cuatro palabras, mi correo es asi yolicanaria13@hotmail.com

escribanme si saben algo

gracias

yolima

de las palmas de gran canaria

Martes, 21 de Noviembre de 2006 a las 16:58 pm - asociación de debate maresía

#09 Saludos a todos y felicitaciones a Yeray por el artículo que me ha parecido muy bueno, da gusto ver que entre tantos prejuicios absurdos y tanta intolerancia solo infundada desde la ignorancia y el miedo a lo nuevo, también hay personas que piensan que la interculturalidad es el mejor camino para el desarrollo y la no discriminación de los pueblos, me gustó mucho la frase 'mezclarse es bueno', si no nos damos cuenta de que el mundo va en esa dirección, la cuál creo es la que traerá un futuro mejor para todos, nos podemos encontrar en un mundo en el los que gustan de prejuzgar serán discriminados, aunque me haya extendido mas en este tema también quiero referirme a tu forma de cantar puntos y décimas, aunque también le das a alguna cancioncilla en italiano, el otro dia lo pude comprobar en persona, un saludos para todos y todas

Viernes, 20 de Octubre de 2006 a las 21:22 pm - sayonara

#08 Hola, quisiera que me dijeran donde puedo conseguir la musica de yeray rodriguez ya que a mi abuelo le gusta y no lo encuentro.

Gracias, espero respuesta

Miércoles, 30 de Agosto de 2006 a las 19:04 pm -

#07 Saludos desde Puerto Rico

Estuve por aqui y me encantaron los escritos....

Educativos, interesantes y autenticos...

Un abrazo

OMAR SANTIAGO

MAPEYE

Jueves, 08 de Septiembre de 2005 a las 03:47 am - Marcamar (Mª del Carmen Martín)

#06 Hola Yeray: Siento gran alegría de encontrarte por aquí. Ya tuve el placer de saludarte en el C.C.Popular de La Laguna (sala San Borondón) donde te dije cuánto admiro tu arte de verseador. El tema que has desarrollado de forma tan extraordinaria, trae a mi memoria los recuerdos d e mi infancia en La Gomera, donde nací y donde me crié escuchando punto cubano. Mi padre tenía una guitarra vieja y siempre para entretenernos o para dormirnos, nos tocaba un rato y nos cantaba las décimas del Telémaco, aquel barco clandestino a Venezuela. Por eso a mi me gusta mucho todo lo referente al verso y al punto cubano. De aquella actuación tuya con José Luis el palmero, tengo yo hechas unas humildes décimas, que me gustaría leyeras algún día. Te las haré llegar. Un abrazo, muchas gracias por tu aportación valiosa a la cultura canaria. ¡¡Animo y adelante!

Viernes, 22 de Abril de 2005 a las 14:55 pm - juan josé herrera -tu fiel admirador-

#05 Aprovecho la oportunidad para saludarte y animar que sigas LUCHANDO POR LO NUESTRO... acuérdate

soy juan josé (castillo de agüimes)

UN FUERTE ABRAZO... y arriba d´ellos

Lunes, 20 de Septiembre de 2004 a las 20:47 pm - Raúl López.

#04 Gracias compañero por tu información y tu empeño por que descubramos nuestro punto cubano y esos muchos canarios que no han permitido que muera.

Lunes, 13 de Septiembre de 2004 a las 22:35 pm - Pedro Martín.

#03 Me alegro haber tenido noticias de esta sección y de la revista seré un fiel seguidor. Felicidades.

Jueves, 09 de Septiembre de 2004 a las 17:46 pm - Agustín Velázquez.

#02 Desde mi isla querida te saluda un admirador, gracias por compartir con nosotros esos 'orgasmos mentales' tuyos. Saludos y a seguir abriendo brechas.

Miércoles, 08 de Septiembre de 2004 a las 17:23 pm - perera

#01 Me ha gustado mucho tu texto, sinceramente. Ese relacionar el punto cubano con la inmigración y con otros aspectos aparentemente no relacionados. Nos haces ver que no se puede analizar un fenómeno cultural desde una sola disciplina, que no se puede entender si no se conoce otras disciplinas. Ello es: lo complejo que es la vida lleva a lo complejo de los análisis de los fenómenos culturales. Un abrazo.