Esta iniciativa, impulsada por la Concejalía de Juventud del Ayuntamiento villero, supone una inversión global de 9.500 euros, de los que 6.800 euros aporta el Gobierno de Canarias a través de una subvención de la Consejería de Presidencia, Justicia e Igualdad, y el resto lo aporta el propio consistorio. El proyecto, que se lleva a cabo entre el 11 y 24 de agosto, lo gestionará la Asociación Cultural Pinolere, experta en esta materia de recuperación y rehabilitación del patrimonio etnográfico y tradicional.

El Viceconsejero de Relaciones con el Parlamento, Participación Ciudadana y Juventud, Manuel González Álvarez, y el alcalde de La Orotava Francisco Linares, junto al edil delegado de Juventud, Eduardo Rodríguez, realizaron una visita al grupo en el espacio municipal de los pajares que se encuentra en el barrio de Aguamansa, en el que realizan sus tareas en estos días. Pero el colectivo también trabajará, en estas dos semanas, en caminos rurales de esta zona de medianías, siguiendo el itinerario de la ruta de los pajares, y en el propio Museo Etnográfico de Pinolere, además de realizar actividades lúdico y deportivas complementarias. 
 

El viceconsejero de Relaciones con el Parlamento, Participación Ciudadana y Juventud del Gobierno de Canarias, Manuel González, recordó hoy que en los cinco campos de trabajo que se han organizado en el Archipiélago durante los meses de julio y agosto han colaborado de forma voluntaria más de 100 jóvenes. Estos participantes, de entre 18 y 30 años,  han desarrollado su labor en diferentes proyectos sociales, complementándose esta formación con un variado programa de actividades. El viceconsejero destacó que a estos campos de trabajo acuden jóvenes de diferentes países o comunidades autónomas, y que esta convivencia “fomenta el trabajo en equipo, la tolerancia, la solidaridad y el aprendizaje intercultural”.
 

Manuel González incidió en la necesidad de conservar los elementos típicos de la cultura tradicional canaria, para que no caigan en el olvido. Por este motivo, según el viceconsejero, “la labor completamente desinteresada que realizan estos jóvenes en el campo de trabajo ‘Ruta de Los Pajares’ de La Orotava es fundamental para conseguir este objetivo.
 

El alcalde Francisco Linares valoró este proyecto, y agradeció la colaboración esencial del Ejecutivo regional y, en especial la predisposición del viceconsejero  Manuel González para con esta interesante iniciativa que permite generar empleo— ya que se ha contratado a tres personas del municipio para ejecutarlo— y que contribuye dar a conocer nuestra cultura. Linares subrayó que se trata de una experiencia singular que enriquecerá a los jóvenes participantes. Además de ofrecer una alternativa de ecoturismo y potenciar el sector socio-económico de la zona.
 

El campo de trabajo permite, asimismo, que los participantes entren en contacto con los vecinos de la zona de medianías de La Orotava y, al mismo tiempo, facilita el encuentro de jóvenes de distintas procedencias, lo que desembocará en un intercambio social y cultural en un entorno rural alejado de los núcleos urbanos. También es una magnífica oportunidad de dar a conocer lugares de interés turístico, natural y cultural de la isla de Tenerife.
 

La Ruta de los Pajares será un atractivo local más que se ofertará al visitante, de fácil acceso, tanto en vehículo como a pie. El turista podrá conocer estas construcciones de cubierta vegetal in situ, en el entorno en el cual subyacen, en la realidad de las personas que los utilizan y conservan.

La realización de este Campo de Trabajo Nacional, donde coinciden jóvenes de distintos ámbitos del país— Aragón, Extremadura, Madrid, La Rioja, Castilla León, Castilla de la Mancha, País Vasco, Andalucía, Asturias, Canarias y Cataluña—contribuirá enormemente a la difusión de los valores culturales y a la puesta en marcha de un itinerario colmado de historia y tradición, con elementos tangibles e intangibles que definen al patrimonio cultural canario.

El edil delegado de Juventud, Eduardo Rodríguez, explicó que los jóvenes realizan labores de acondicionamiento en los pajares de Aguamansa y su entorno, punto de partida del sendero y donde se prevé crear un centro de interpretación. También actuarán en el recorrido y en el propio Museo etnográfico de Pinolere que es donde concluye la ruta. Entre otras cosas se llevarán a cabo labores de limpieza de los inmuebles y rehabilitación de elementos deteriorados como los hibrones de madera o los palos de la techumbre, además de eliminar cualquier objeto impropio de la construcción tradicional. Asimismo, adecuarán los muros y las puertas, y aplicarán tratamientos de conservación a los elementos de madera de las cubiertas vegetales. Se colocarán paneles informativos con contenido sobre los pajares y la cultura asociada, y junto a estos se pondrán elementos y objetos relacionados con la cultura popular de la zona. A la par se mejorará la señalética y el suelo de los jardines de plantas endémicas y árboles en el entorno de los pajares, ya que existen diversas especies que necesitan un tratamiento y cuidado
 

La técnico y coordinadora del proyecto, Yaiza González, destacó que “La Ruta de Los Pajares”, entre Aguamansa y Pinolere, ofrecerá información de los pajares y otros contenidos como elementos arquitectónicos relacionados con el agua (chorros, acequias, canales...), elementos relacionados con el sector primario (sistemas de cultivo, formas de vida en la zona...) y aspectos diversos sobre la cultura en ámbitos rurales. Este campo de trabajo, va a permitir acercar a los jóvenes a la agricultura tradicional, y a los modos de vida de una sociedad campesina, que aún mantiene vivos los sistemas de cultivo y las labores agrícolas. El vínculo con las formas de vida en un ambiente rural, natural y agrícola, contribuirá al desarrollo de estos jóvenes, a través de dinámicas de trabajo al aire libre, mediante la experimentación y la motivación por conocer costumbres y culturas nuevas, similares o no, a las de sus lugares de origen. El resultado será la concienciación de los jóvenes para conservar, valorar y mantener la cultura de los pueblos.

No menos relevante es la mejora y acondicionamiento de los espacios contiguos, ya que existen algunas construcciones aledañas a los pajares que se utilizarán con fines diversos como el almacén o los aseos. Espacios que deben acondicionarse  para su correcto uso.
 

Entre otros objetivos del proyecto están el revalorizar los pajares como patrimonio histórico y cultural de La Orotava y de Canarias, así como el paisaje agrícola y los núcleos rurales del municipio; dinamizar económicamente las zonas rurales de alto valor etnográfico, natural y artesanal y fomentar valores de convivencia de los jóvenes con la ciudadanía a través del conocimiento de la cultura tradicional. Pero como acciones específicas destaca la activación del itinerario por la citada ruta; acondicionar y mejorar los puntos de salida y llegada de ésta y sensibilizar a los jóvenes voluntarios del campo de trabajo en la importancia de valorar, conservar y difundir el patrimonio cultural de cualquier lugar.
 

RUTA DE LOS PAJARES

El municipio de La Orotava posee la mayor concentración de pajares del territorio insular, construcciones de cubierta vegetal que se apoya en muros de piedra. Este hábitat, propio de las sociedades más desfavorecidas del pasado, toma en la actualidad una importancia clave en el desarrollo de esta zona agrícola, serpenteada por caminos antiguos, llenos de historia y tradición, donde se mantiene vivo otro de los oficios tradicionales más importantes en la zona, el de tapador de pajares, persona que coloca las techumbres vegetales siguiendo una técnica ancestral. Es por ello, que el Ayuntamiento trabaja en la creación de esta denominada “Ruta de Los Pajares”. Este sendero, que  conecta dos núcleos rurales de las zonas altas del municipio como son Aguamansa y Pinolere, ofrece un itinerario atractivo de cultura popular y tradición ya que es un recorrido entre zonas de cultivo que muestra al visitante diversos pajares en varios estados de conservación, mimetizados con el paisaje, contextualizados en el entorno y aún utilizados por sus propietarios para multitud de fines agrícolas y ganaderos.

La ruta parte del núcleo de Aguamansa, con tres pajares de propiedad municipal, que será el futuro Centro de Interpretación, atraviesa el vecindario con varios puntos temáticos de interés, como terrenos de siembra del cereal necesario para las cubiertas vegetales o chorros de agua antiguos. El itinerario recorre varios núcleos rurales con diversos pajares en lugares como Aguamansa, Mamio, Los Cominos, La Pasada de Montenegro y Pinolere. Finalmente, culmina en el Museo Etnográfico Pinolere, donde se recrea este hábitat tradicional.

La defensa, mantenimiento y conservación del patrimonio histórico y cultural de Canarias son fundamentales para el desarrollo rural de las Islas Canarias. La cultura popular de un lugar y todas las actividades relacionadas con ésta, son un recurso potencial básico para poner en valor determinadas zonas aisladas orográficamente. Las nuevas generaciones deben conocer y aprender de los aspectos culturales que conforman y constituyen la identidad social, de esta forma se contribuye a la conservación del patrimonio de todos y a la transmisión de los conocimientos a las nuevas generaciones. La revalorización de los pajares, a través de esta ruta, en un entorno rural y agrícola, fomenta la dinamización económica, contribuyendo así al desarrollo local y a la disminución del éxodo rural.